Recomendado para grupos de amigos

Estuve con un par de amigos, y lo mejor fue el trato de Pascual, el dueño, super amable. La casa estaba bien calentita, en diciembre se agradece mucho.

No era barato, pero aceptable.

Excelente atención del dueño, muy dispuesto a ayudar. Espacio comun amplio y calefacción que funcionaba de maravilla. Ideal para grupos. La bodega, un buen plan para compartir con amigos. Noche fría pero estuvo todo bien caldeado, se pasó lindo.

La casa era acogedora y perfecta para un grupo. La cocina estaba bien equipada y el espacio común era bastante amplio. La calefacción funcionaba muy bien en las noches frías. Además, el dueño fue muy servicial durante nuestra estancia. 👍

aunque la casa estaba un poco anticuada, la atención del dueño fue estupenda! ! además, la calefacción funcionó a la perfección y tuvimos un bonito espacio común para socializar con amigos. ¡el aparcamiento también fue un gran plus!

Acceso a aguas termales naturales, talleres y eventos al aire libre, programas de actividades para niños

Además, el acceso a alimentos fue complicado en la zona, lo que requiere mejora en las opciones cercanas para cenar. ¡Una piscina en mantenimiento es inaceptable!!! Las decoraciones en algunas partes son obsoletas y necesitan una renovación urgentes.

Encantador lugar para descansar rodeado de naturaleza y tranquilidad.

El dueño fue muy amable y me ofreció información sobre rutas y actividades en la zona, lo que hizo que la estancia fuera más rica. Las habitaciones son cómodas y están limpias. Sin embargo, la piscina no estaba disponible por mantenimiento, y el acceso a la cocina era limitado, lo que podría mejorar la experiencia.

la tranquilidad del lugar y la amabilidad del propietario fueron aspectos resaltantes durante mi visita a alhama de aragón. además, la cercanía al lago termal más grande de europa y la posibilidad de recibir recomendaciones sobre lugares interesantes para visitar fueron un gran plus.

la piscina estaba fuera de servicio.

la increíble experiencia de convivir con amigos en villa pachita, disfrutando de la atención excepcional del propietario y la libertad de llevar a nuestras mascotas

Estuve con la familia en Villa Pachita y la experiencia fue increíble. La habitación era cómoda, con un ambiente cálido y acogedor. El gran detalle fue que pudimos llevar a nuestros perros y disfrutar de la naturaleza sin preocupaciones. El dueño, super amable, estuvo pendiente de nosotros, lo que hizo que nos sintiéramos como en casa. También, aunque la piscina no estaba disponible, la calidez y atención nos hicieron olvidar eso. Sin duda, ¡un lugar para recordar con cariño!

el propietario nos ofreció una bodega para cocinar con amigos. la piscina necesita más cuidado.

La casa es acogedora y el trato del dueño es excelente. Las magdalenas del desayuno en la bodega estaban buenísimas. La piscina, sin embargo, no estaba disponible por mantenimiento. La señal de Wi-Fi era un poco inestable en algunas áreas, especialmente al comunicarse con otros.

El lugar es acogedor y la atención del dueño fue excelente. La calefacción funcionó perfectamente, lo que hizo la estancia más cómoda.

La habitación estaba mal cuidada, con muebles variados y limpieza justa. La piscina necesitaba más cuidado y la facilidad para acceder a alimentos cercanos era limitada.

acogedora estancia con buena atención al detalle

atención personalizada, limpieza general

habitaciones pequeñas

el lugar es perfecto para desconectar en la naturaleza, con una atención excepcional del personal, que estuvo siempre a disposición. la ubicación cerca del lago termal es un plus para quienes buscan relax.

es necesario mejorar la variedad del desayuno 🍽️.

El espacio tiene su encanto, especialmente el merendero, bien acondicionado y listo para disfrutar. La calefacción funcionó perfectamente, lo que hizo la estancia más cómoda durante las noches frías.

La habitación donde estuve estaba mal cuidada, con muebles incongruentes y un aire acondicionado en el suelo que resultaba incómodo. La limpieza fue justa y el baño, aunque funcional, resultó un poco pequeño. Además, la oferta de desayuno fue inexistente y el acceso a opciones de comida cercanas se tornó complicado en febrero. Para cenar, mejor ir en coche, pues la distancia hacia el pueblo es bastante oscura y poco segura. encontré poco atractivo el entorno en algunas áreas, como escaleras con ventanas sucias y escombros visibles.